Tepic, Nayarit, 22 de Octubre del 2013
El investigador y profesor Carlos Calvo Muñoz de la universidad de la Serena, Chile, impartió la conferencia "Del mapa escolar al territorio educativo: diseñando la escuela desde la educación", en un evento organizado por el área de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN).
Patricia Ramírez, coordinadora de dicha área recibió al conferencista y se congratuló ante su presencia en esta casa de estudios. Así mismo, se contó con la presencia de titulares, docentes y estudiantes de la Maestría en Educación y la Licenciatura en Ciencias de la educación, programas impulsores de este evento.
En su intervención, Carlos Calvo dijo que educar apunta a apoyar al educando a establecer conexiones entre un elemento y otro “todo el trabajo se dirige a favorecer la creación de relaciones posibles”.
Hizo hincapié en que tal vez en la escuela no todo sea posible, pero en términos educacionales sí. “Debemos asombrar al educando, y que así ellos aprendan” además explicó que todos los seres humanos, con o sin estudios, vivan donde vivan y hablen cualquier lengua, son educadores, pero algunos han profesionalizado esa condición.
“Los que estudiamos pedagogía nos convertimos en profesionales de educación, este cambio en ocasiones es negativo, ya que la condición inicial de educador es pervertida y frenada en este proceso, esto, a pesar de las buenas intenciones de los docentes, ya que educar es asombrar con un misterio”.
Añadió además, que el riesgo educativo está en buscar en una enciclopedia la explicación de un suceso, y es un riesgo porque se llega con la respuesta sin indagar en el misterio, y a la escuela se va a indagar, a caer en el territorio, a confundirse y así, explorar y encontrar. “No estoy en contra de los libros, me encantan, pero hay que saber cuándo leerlos”.
Carlos Calvo también explicó que “la escuela priva a las personas de las expectativas que se tienen en una edad determinada, se deben planificar las actividades, si, pero también dejar investigar a los educandos, para que indaguen respuestas”.
La persona tiene que sumergirse en el misterio que le provoca un tópico que está escudriñando- agregó- y así proponer más preguntas que respuestas, y de esta manera establecer hipótesis, analogías, conexiones.
Para culminar su intervención, agradeció la invitación realizada por la UAN, así como a los presentes al evento, quienes llenaron a toda su capacidad el auditorio de la biblioteca magna.
Coordinación de Prensa de la UAN