La
Secretaría de Rectoría deberá de trabajar en comunicación y colaboración con la
Rectoría, los secretarios y secretarías, personal administrativo, personal
docente, directores de unidades académica, estudiantes y la sociedad en
general; acorde con las
políticas, estableciendo mecanismos sistemáticos, coordinados y
coherentes, velando por una gestión responsable, articulada y congruente, de
respeto a los derechos humanos, la equidad y la responsabilidad social
universitaria.
Dicha
instancia brindará la atención oportuna a las necesidades de la comunidad
universitaria, permitiendo desahogar la agenda de una manera eficiente, creando
así una buena imagen pública de la administración rectoral, generando confianza
en la ciudadanía. Lo anterior permitirá eficientizar los procesos
administrativos y ofrecer servicios más oportunos, con calidez humana y de manera
personalizada.